La cartera castigada afecta la capacidad de pago de los clientes y el flujo operativo de las compañías, lo cual genera pérdidas de capital y costos adicionales.
En esta guía descubrirás cómo prevenirla y gestionarla de la manera más eficiente.
¿Qué es una cartera castigada?
La cartera castigada se refiere al conjunto de deudas que, después de un largo período de impago (generalmente más de 90 días) una entidad financiera ha clasificado como incobrable tras agotar todos los esfuerzos razonables de cobro.
A pesar de esta clasificación interna, es vital comprender que la deuda castigada no se elimina. La obligación de pago persiste y esta situación impacta de forma negativa el historial crediticio del deudor, afectando su capacidad para acceder a futuros créditos.
Diferencia entre la cartera vencida y la cartera castigada
Es común confundir la cartera vencida con la cartera castigada, pero su distinción es clave para una gestión de riesgos efectiva. La cartera vencida está conformada por deudas con pagos atrasados que la empresa o institución financiera aún considera recuperables por lo cual los procesos de cobranza siguen activos.
En contraste, la cartera castigada es el último paso, donde la empresa da por perdida la posibilidad de recuperar el dinero a través de sus gestiones tradicionales, aunque legalmente la deuda sigue existiendo.
Factores que generan cartera castigada
Identificar las causas de una cartera castigada es fundamental para prevenir futuros riesgos y proteger la situación financiera de una organización. Algunos de los factores más comunes que llevan a una deuda a ser clasificada como crédito castigado son:
- Dificultades económicas del deudor: problemas como la pérdida de empleo o una crisis personal pueden afectar directamente la capacidad de pago de un cliente, haciendo imposible que cumpla con sus obligaciones.
- Falta de planificación financiera: tanto a nivel individual como empresarial, la ausencia de una estrategia de pagos y la acumulación de múltiples deudas, como una tarjeta de crédito, pueden llevar a un punto de no retorno.
- Desconocimiento de las consecuencias: muchos deudores no son conscientes del impacto que la falta de pago tiene en su historial crediticio y en su futuro financiero, como la dificultad para obtener nuevos créditos o una tasa de interés más alta.
- Situaciones imprevistas: eventos inesperados como enfermedades graves o desastres naturales pueden alterar drásticamente la capacidad de una persona o empresa para cumplir con sus compromisos económicos.
- Falta de seguimiento: una gestión de cobro deficiente, con una tardanza en el seguimiento al vencimiento de las facturas, permite que una deuda minorista se convierta en un problema mayor.
- Otorgar crédito sin analizar el perfil del cliente: conceder crédito sin una evaluación exhaustiva del perfil del cliente y su historial financiero aumenta la probabilidad de que la deuda se vuelva incobrable.
- No tener políticas claras de cobro: la ausencia de un plan de gestión de cobro bien definido y automatizado puede llevar a que los procesos se vuelvan ineficientes y no generen acuerdo de pago con el deudor.
¿Cómo puede afectar la cartera castigada a las empresas?
Una cartera vencida tiene un impacto directo y negativo en la rentabilidad y el crecimiento de una empresa. Los efectos más relevantes son:
- Pérdida de capital recuperable: los recursos que podrían haberse destinado a expansión, innovación o retención de clientes se ven comprometidos por la pérdida definitiva de capital.
- Aumento en los costos operativos: la gestión de cuentas que se acercan a ser incobrables consume valiosos recursos. Las empresas invierten tiempo y dinero en procesos de cobranza manuales y personal que no generan retorno, lo que eleva los costos de operación y reduce la eficiencia.
- Disminución en la efectividad de los equipos de cobranza: al no priorizar las cuentas con mayor probabilidad de pago, se diluyen esfuerzos y disminuye el impacto real de la gestión de cobro.
- Dificultades para escalar el negocio: una alta cartera castigada limita la capacidad de la empresa para crecer de forma sostenible, ya que la recuperación tradicional no está diseñada para manejar volúmenes masivos de forma eficiente.
Guía para negociar deudas en cartera castigada de forma efectiva
Aunque la deuda se considere incobrable, aún es posible recuperar una parte del monto perdido a través de estrategias de negociación efectivas, reduciendo la pérdida total.
Aquí te presentamos una guía con consejos prácticos para negociar estas deudas:
Evalúa el perfil del deudor
Analiza el historial crediticio y la capacidad de pago del cliente. Utiliza la información disponible en las centrales de riesgo para comprender el contexto de su situación financiera y definir una estrategia de cobranza adecuada.
Define una estrategia de contacto
Más allá de las llamadas, utiliza canales digitales como WhatsApp o correo electrónico para llegar al deudor de forma directa y menos intrusiva. La clave es ofrecer una experiencia de pago amigable.
Ofrece opciones flexibles de pago, plazos o refinanciamientos
Propón acuerdos de pago viables. Considera la posibilidad de ofrecer planes de pago flexibles, plazos o, en casos específicos, una condonación parcial o total de los intereses. Un plan de refinanciamiento puede ser una excelente herramienta para recuperar el capital.
Registra y automatiza acuerdos
Una vez que se llega a un acuerdo, es crucial registrar y automatizar el seguimiento. El uso de sistemas de gestión financiera ayuda a llevar un control preciso de las cuentas por cobrar y a enviar alertas de vencimientos, lo que evita que los acuerdos caigan en el olvido.
Mide resultados y optimiza
El análisis de datos es fundamental. Monitorea el éxito de tus estrategias y ajusta tus procesos de cobranza para optimizar la recuperación.
Optimiza la gestión de cobranza con la infraestructura AI de Colektia
Para optimizar y automatizar la gestión de cobranza, la plataforma de Colektia es el aliado ideal. Nuestras soluciones de inteligencia artificial te permiten llevar el control de tus cuentas por cobrar y gestionar deudas de forma masiva y eficiente. Contamos con diversos servicios tales como:
- Workflows de cobranza: diseña y automatiza flujos de cobranza ajustados a tus reglas de negocio, con procesos flexibles y eficientes.
- Agente de Cobranza AI: integra conversaciones por voz y texto automatizadas que escalan tu operación y mejoran la experiencia del cliente.
- Centralización y organización de tu información: integra datos de diversas fuentes de forma segura y ordenada. Facilita análisis avanzados y crea modelos predictivos con AI que optimizan la toma de decisiones.
- Asignación y priorización de carteras con AI: nuestro router con AI asigna y prioriza las carteras según reglas de negocio configurables. Además, gestiona múltiples interfaces y optimiza resultados con monitoreo en tiempo real.
- Gestión omnicanal: interactúa de manera fluida y automática por email, SMS, WhatsApp y voz, con estrategias de AI personalizadas según el comportamiento de cada cliente.
- Toma decisiones con visibilidad total: accede a dashboards personalizables, reportes automatizados y análisis predictivos.
No pierdas más dinero por cuentas incobrables. Con Colektia, gestiona tu cartera con inteligencia y recupera lo que es tuyo.